Desde el pasado enero una majestuosa pareja de búho real ha anidado en El Retiro y hay un tercer ejemplar que se ha dejado oír en el entorno del parque. Busca pareja. No usa Tinder, pero sí un embaucador canto sobre todo con luna llena
Lo más probable es que reproduzcan la especie siempre y cuando tengan la suficiente tranquilidad para hacerlo y no haya cualquier otro animal que les perturbe.
Las crías empezarían su hipotética dispersión en otoño en busca de un nuevo territorio desocupado en el que continuar con su desarrollo
Redacción Cibeles
¿Rapaces el Retiro? Lo que lees. Es un hito para la biodiversidad madrileña. Para garantizar la permanencia y la cría de esta bella ave nocturna te pedimos tu colaboración para no perturbar el entorno. Estas son las cinco razones para ‘mimar’ a la pareja de búho real, nuevos inquilinos de El Retiro:
- El búho real es la rapaz nocturna más grande de la fauna europea tanto por su corpulencia como por sus poderosas garras, su voluminosa cabeza y su oído excepcional, aunque esas ‘orejas’ que rematan la cabeza sean solo ‘plumas’. Son majestuosos. Por algo se apoda ‘Gran Duque’.
- Seguro que no sabías que su nombre científico es Bubo Bubo pero identificas a la perfección su canto a kilómetros de distancia. Tanto machos como hembras, ellas con una voz algo más aguda, emiten un profundo y grave <<buhuu>>, que puede escucharse a gran distancia. Durante la época de celo, las parejas se contestan con una serie más rápida de notas cortas. Y cuando cantan, sobre todo con luna llena, dejan ver su pechera blanca. ¿Quieres oírlo? Puedes hacerlo en la web de SEO/BirdLife
- Sus ojos anaranjados hipnotizan, pero sobre todo sirven para cazar durante las primeras horas después del atardecer y las últimas horas antes del amanecer. Cuando detectan la presa, descienden a gran velocidad sobre ella. Sus plumas desflechadas omiten cualquier tipo de sonido. Las garras hacen el resto. Su presa habitual es el conejo, aunque su dieta es de lo más variada: erizos, reptiles, peces o anfibios son algunas de sus presas. Ahora bien, la llegada a El Retiro no supone amenaza para la fauna de la zona. Todo lo contrario: reducirá de forma natural roedores. Eliminan población vieja, enferma y marginal y contribuyen a controlar las poblaciones de otras especies.
- ¿Desde cuándo vuelan por aquí? Los búhos reales son muy sedentarios y normalmente mantienen su actividad en un solo territorio durante su periodo adulto. Han elegido El Retiro desde el pasado mes de enero para desarrollar su vida adulta y su llegada, posiblemente desde El Prado, no ha debido de ser fácil. Primero lo hizo el macho, que empezó a llamar a la hembra. Luego lo hizo ella. Y más tarde se estableció otro macho, un tercer ejemplar, que se está afanando en encontrar pareja para también poder aposentarse. Si no lo consigue emigrará a Toledo, Guadalajara o Ciudad Real en busca de su alimento favorito, los conejos.
Posiblemente provengan del Pardo, donde no haya espacio ni alimento para toda la población. Han elegido El Retiro como ecosistema favorable para su vida adulta.
5. ¡Puede que crien! La pareja parece estable y ya ha copulado, así que lo más probable es que la especie se reproduzca siempre y cuando tengan la suficiente tranquilidad para hacerlo y no haya cualquier otro animal que les perturbe. Las crías no tendrán sitio en el Retiro con sus padres porque no hay caza para todos por lo que en otoño empezarían su hipotética dispersión en busca de un nuevo territorio desocupado en el que continuar con su desarrollo.
Nuestros nuevos vecinos, como buenos rapaces, prefieren los barrancos y acantilados rodeados de gran cantidad de árboles, pero se han ubicado cerca de los Jardines de Cecilio Rodríguez. Observarás vecinos, visitantes, expertos, fotógrafos que se citan para su avistamiento.
Posados con su plumaje en tonos leonados, pardos y marrones son un espectáculo, pero os recordamos que son especies protegidas por ley. Administración y ciudadanía tenemos la obligación de protegerlas.
Acércate lo menos posible y si en algún momento el búho hincha sus plumas y se tensa, aléjate. No queremos molestar y no queremos perderlos.