Juan Muñoz fue un artista que constantemente dialogó con la historia del arte, tomando inspiración de diversas épocas, especialmente el Renacimiento y el Barroco.
Creció en Madrid y el Museo del Prado fue una de sus principales fuentes de inspiración. Su obra estuvo influenciada por artistas de distintas épocas, desde Parmigianino hasta Goya, y valoró la teatralidad, el ilusionismo y la arquitectura como recursos expresivos. Durante su estancia en Roma, absorbió las influencias de Borromini, Bernini y Piranesi.
En particular, su relación con Velázquez y Goya fue fundamental: con Velázquez, compartió el interés por dignificar a las personas con enanismo y por capturar momentos fugaces en el tiempo; con Goya, exploró la compleja línea entre el humor y la violencia. Su obra refleja una reflexión sobre la percepción del espectador y la relación entre quietud y
