¿Cómo íbamos a dejar pasar esta cita rosa? ¡Nunca jamás! Siempre hemos querido participar pero es que ahora, la sentimos como propia, la siento como propia…. La marea rosa es mi marea.
Desde yosilose.com siempre hablamos en base a experiencias propias, lo sabes. Y en esta ocasión también es así…
Es posible que lo recuerdes pero, por si nos has conocido hace poco, te pongo en antecedentes de forma breve. En junio del año pasado me diagnosticaron un cáncer de pecho y después de un tratamiento de quimioterapia, una mastectomía total y radioterapia, puedo considerarlo una experiencia de la que he aprendido mucho.
El 19 de octubre es el Día Internacional del Cáncer de mama, un día que pretende concienciar a las mujeres sobre la importancia de un diagnóstico precoz y apoyar con notoriedad a la investigación y el desarrollo de tratamientos y diagnósticos. Gracias a los avances en estos campos, el cáncer de mama es uno de los que cuenta con un mayor índice de supervivencia.
¿Sabes la estimación que dice que una de cada ocho mujeres serán diagnosticadas de cáncer de mama? Pues en nombre de todas ellas y en el mío propio, no puedo más que agradecerte tu tiempo en leerme, tu colaboración en algunas de las múltiples acciones que se ponen en marcha con motivo de este día, tu apoyo y sensibilidad ante esta causa… Gracias. Muchísimas gracias. En esta enfermedad se trabaja mucho y maravillosamente. Y son enormes los medios y tratamientos que podemos recibir cuando nos diagnostican. Gracias desde mi yo físico que se ha beneficiado de todo ese trabajo.
Y aprovecho este post para dar las gracias también desde mi yo emocional. A ti, que no te conozco pero que seguro te sensibilizas con esta causa y a todos los míos que me han acompañado durante este proceso. Creo que ya lo he hecho en persona con la mayoría de ellos pero me apetecía que el post conmemorativo de este 2022 tuviese un pequeño espacio de gracias con nombre propio…
A mi marido, Diego, al que le doy la gracias por levantarme cuando no tenía fuerzas, abrazarme cuando me sentía triste, acompañarme a todas las revisiones, participar de las consultas llevando la voz cantante. Y a mi hijo, Yago, por ser esa voz sensata que no me dejaba caer en el victimismo. Y a mi hija, Cristina, que siempre tenía un abrazo lleno de amor para mi.
Doy las gracias a mi hermana Marta por hacerme sentir una heroína. Y a mi madre por permanecer fuerte y segura. Doy las gracias a mi prima Bego, que me acompañaba a través de un peluche en cada sesión y en cada consulta. Y a mis amigas, Belén y Esther, las otras participantes del chat del desahogo, constantemente pendientes y correas de transmisión.
Doy las gracias a mi amiga María y su «tú cuídate por dentro que yo me encargo de cuidarte por fuera». Y a mi amiga Bárbara por darme la mano durante tooooda mi agenda médica. Y a Nöelle por sus maravillosas llamadas diarias impregnadas de esa sensatez tan de ella. Y a Natalia por sus llamadas de control. Y a Marta y sus llamadas llenas de cariño, y a sus padres que han rezado a diario por mi sin siquiera haberme visto la cara. Y a la otra Marta, con su preciosa costumbre de escribirme «¿que tal vas, corazón?». Y a mi sobrina María, por pedirme el parte rigurosamente. Y a Sonsoles y su cuenta atrás de los lunes, sin fallar una.
Doy las gracias a mi socia Teresa porque siempre ha estado ahí, dispuesta a adaptarse a mi ritmo y porque ha estado orgullosa de mi y me lo ha dicho. Y a mi queridísima Ana, de Velázquez 59, y sus maravillosos tratamientos de fisioterapia y cariño que me han ayudado a estar siempre fuerte. Y a Miguel y su equipo de Rebel Gym que me han adaptado con todo el cariño todos los ejercicios para seguir en forma… (y aún lo hacen). A mi amiga Concha que aún descolgada del día a día, siempre tenía un recuerdo para mandarme un mensajito. Y a mis tíos que me han dado ese cariño de padres postizos.
Y con una despedida a lo «Oscars de Hollywood», se me acaba el tiempo y son muchas más las personas a las que mencionar. Porque han estado apoyándome en todo este proceso y he notado su presencia… Mis primos Elena, Marta y Juan Ignacio, mi amiga Mar, Ana H, Ana D, María Luisa, Natalia, Bea, Esperanza, Nuria, Pepe, Adela, Begoña, Alfonso, María, Isabel, Susana, Ester, Meri, Rocío, Teresa, Marta… ¡Gracias a todos!
Y es que el apoyo familiar y del entorno resulta fundamental para una persona que viva este trance. Para esto también es el Día Internacional del Cáncer de mama. Para hacer sentir a las mujeres que están pasando por un proceso así, que la sociedad está con ellas. Que hay capital humano y económico trabajando por conseguirles una buena curación ¡qué importante labor!
Gracias a ti también, por apoyar cualquier iniciativa que suponga poder seguir avanzando en la lucha contra el cáncer de mama. Por apoyar a esa mujer cercana que atraviesa por esta circunstancia. Por sensibilizarte con esta lucha.
Busca el rosa a tu alrededor. Son muchas las marcas y las asociaciones que lanzan iniciativas muy apetecibles para conseguir más financiación destinada a la investigación y al desarrollo de tratamientos. Busca el rosa en tus marcas favoritas de cosmética, en las de moda, en la siempre maravillosa Asociación Española contra el Cáncer… Estos días, búscalo.
Este 19 de octubre es el Día Internacional del Cáncer de Mama pero para mi ya todos los días lo son. El cáncer de pecho es pelea propia más que nunca. Y he tenido mucha suerte porque vivo en un país y en un tiempo en el que tiene cura gracias a toda esa investigación.
Por tu parte, y como ya sabes y no debes olvidar, no dejes tus revisiones periódicas y tampoco ningunees cualquier alerta de tu cuerpo que pueda ser sospechosa…
Y muchas gracias de nuevo, por hacer de esta también tu lucha… ❤
Eva.