El pequeño espacio que une las calles San Mateo y Beneficiencia y que sirve como entrada al instituto cercano tendrá el nombre de un recordado actor español, después de que el pleno de la Junta de Centro apruebe esta tarde una propuesta consensuada por los partidos para llamar a este espacio Pasaje de Tony Leblanc.
Una fiesta con amigos y sin ti: el día en el que Raffaella Carrà tuvo por fin su plaza en Madrid
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El consistorio recuerda con esta distinción a Leblanc, fallecido en el año 2012 y que desarrolló parte de su carrera teatral entre las bambalinas de lugares como el actual Teatro Lara y otras tablas del centro de Madrid. Lo hace solo unos días después de colocar la placa que da el nombre de Raffaella Carrá una plaza de la calle Fuencarral.
El pasaje que cuando se cumplan los trámites pertinentes contará con nombre oficial por primera vez ya tuvo hace unos años un nombre oficioso, fruto de una broma: era conocido popularmente como pasaje de Modesto Martínez, ciudadano que a finales del siglo XX decidió adjudicarse una calle que nació al abrirse un nuevo solar entre San Mateo y Beneficencia.
El vecino lo hizo de la manera más directa posible: colocando él mismo la placa con su nombre. Aunque el pasaje ha sido así nombrado en varios foros –incluido el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid- la pervivencia oficial de la nomenclatura se quedó ahí. Por aquel entonces el pasaje era más ancho y contaba con un solar con columpios, que se convirtió años después en el hostel que ahora, junto a su terraza, más de la mitar de la calle hasta ese momento disponible.
El caso del pasaje de Modesto Martínez es solo uno de los muchos nombres populares que los ciudadanos ponen a distintos lugares de Madrid y que algunos llegan a pervivir durante muchos años en la memoria.
Fuente: ElDiario.es – Malasaña