Un viaje a la ciudad costera de Paracas, donde se encuentran las Islas Ballestas, también conocidas como las “Galápagos de los pobres” y la Reserva Nacional de Paracas, es probablemente el mejor lugar cerca de Lima para poder pegarse una escapada.
En unos pocos kilómetros cuadrados he podido ver enigmáticos hallazgos arqueológicos, playas impresionantes y asombrosos paisajes desérticos, y una extraordinaria aunque para mí aún desconocida, diversidad de fauna aviar y marina.
Lo mejor de Paracas es que está a sólo cuatro horas en coche de Lima, lo que la convierte en un lugar muy práctico para una escapada rápida desde la capital. Así que si conoces a alguien con coche en esta ciudad, te será más fácil convencer a esta persona para que puedas hacer este viaje, debido a que solo se puede llegar allí por tierra.
Miremos un poco estos magníficos lugares cerca de aquí:
El Candelabro
De camino a las Islas Ballestas, he pasado por El Candelabro, un gran petroglifo prehistórico de origen desconocido que mide más de 150 m de alto y 50 m de ancho. Parece sencillo decirlo pero en persona se ve inmenso.
Aún no se sabe con certeza por qué se grabó aquella figura en las colinas arenosas, pero hay muchas teorías y la más razonable es que se utilizó como guía de navegación para los antiguos marineros.
Islas Ballestas
Es la atracción más conocida por los viajeros en Paracas. Una vez agarrado el transporte todo el camino es muy árido, pero al llegar y conocer el mar, es un paisaje lleno de vida. Me hizo mucha ilusión poder conocer los pingüinos y lobos marinos de las islas ballestas, pero hay que tener en cuenta que dentro de las islas no se puede desembarcar si contratas un barco, debido a que es una reserva nacional, así que tocó un poco de lejitos.
Las islas albergan cientos de especies animales, como el pingüino de Humboldt en peligro de extinción, focas, muchas aves subtropicales (el piquero de patas azules, el guanay, etc.) y mucha más fauna exótica e interesante.
Reserva Nacional de Paracas
Esta península representa un punto donde el desierto más árido de la Tierra se encuentra con el océano Pacífico, creando un paisaje muy pintoresco y dramático.
Al igual que las Islas Ballestas, la Reserva Nacional de Paracas es una zona protegida para muchas especies importantes de fauna, sobre todo aves. En total, la reserva alberga 74 especies de plantas, 216 especies de aves, 16 tipos de mamíferos, 10 especies de reptiles y 193 especies de peces. El principal atractivo, sin embargo, es el paisaje.
Lo que más aprendí de esta experiencia fue la importancia de proteger nuestro medio ambiente y la vida marina. Al visitar las Islas Ballestas, pude ver de cerca la riqueza de la fauna marina y la importancia de conservarla para las futuras generaciones. Finalmente, en la Reserva Nacional de Paracas, pude apreciar la diversidad de la flora y fauna del lugar, y cómo la naturaleza puede ser tan maravillosa y frágil al mismo tiempo. En resumen, mi visita a Paracas me enseñó sobre la importancia de cuidar y preservar nuestro entorno natural porque a veces suele pasar que la vida es como una lluvia de arena que viaja con viento.
En fin, amigos, no puedo dejar de recomendarles que si tienen pensado tomar un vuelo hacia el Perú, no dejen de visitar Paracas. ¡Es una experiencia que no se pueden perder! Si les gusta la naturaleza, las playas, y la aventura, ¡Paracas es el lugar indicado!
Fuente: Houdinis